The Terror

Si este año ha sido pírrico en mis lecturas, más lo ha sido con las series de televisión. La diferencia es que con los libros siento más culpabilidad. Aunque ahora se produce mejor televisión, las series resultan un agujero negro de consumo de tiempo. Este artículo lo explica mejor. Sin embargo, trato de no alejarme mucho de ellas. Siempre habrá contenido que valdrá la pena de ver, aunque sea emitido hace años y no genere mucha conversación durante los cafés.
The Terror me llegó gracias a la curiosidad y el buen gusto de un primo con afinidad a las series épicas y de época. Ésta tiene algo que resulta muy favorable que para que la vea: es una serie corta. Se compone de diez episodios que van entre 45 a 60 minutos de duración. Adapta la extensa novela de Dan Simmons, autor de ciencia ficción muy conocido por la saga Hyperion. La obra de Simmons a su vez se inspira en los hechos verídicos de la fallida expedición de Sir John Frankin a mitad de siglo XIX, la cual consistía en buscar un paso marítimo en el Ártico para llegar Océano Pacífico. Estaba conformada por alrededor de 128 hombres que viajaban en dos barcos: el HMS Erebus y el HMS Terror. Partieron de Inglaterra en 1845 y nunca volvieron.
La misión de Frankin no era de las primeras que buscaban una ruta de tránsito en el Ártico, aunque sí una de las más tristemente célebres. Tan infructuosa como la travesía fueron las posteriores búsquedas de supervivientes o sus restos. En 150 años apenas se hallaron rastros de esqueletos, algunos con signos de canibalismo. También se recogieron testimonios de los esquimales, documentos guardados en montículos de piedra y algunas exhumaciones hechas muchos años después. Sería hasta 2014 y 2016 que se encontraran los restos de las naves Erebus y Terror respectivamente, cerca de la Isla Rey Guillermo en el Ártico canadiense. Un archipiélago que pasa congelado buena parte del año. Antes en 2007 Dan Simmons publicaría su novela, la cual muchos describen como una mezcla entre la épica de las ficciones náuticas de Patrick O’Brian (autor de Capitán de Mar y Guerra) con el terror de Stephen King.

Además del componente histórico y trágico de la travesía por el Ártico, Simmons se nutre del elemento fantástico de la mitología esquimal. Eso a través de una misteriosa criatura que va asediando a los marinos ingleses. Pero junto a la bestia es el hielo y el extenso vacío blanco lo que va mermando el ánimo entre los tripulantes del Erebus y Terror. Con los barcos anclados en el hielo van sucumbiendo a las enfermedades, la escasez de alimento, los atisbos de motín y al aislamiento.
Con ésta historia no resulta difícil evocar a otros clásicos semejantes de aventura y terror helado. Como la “casual” trilogía que conforman las novelas de Edgar Allan Poe, Julio Verne y H.P. Lovecraft: La narración de Arthur Gordon Pym (1838), La esfinge de los hielos (1897) y Las montañas de la locura (1936). Mientras que El Terror se ambienta en el Polo Norte éstas otras obras se desarrollan en el Polo Sur. Tuunbaq contra Tekeli-li, como subtitula la columnista en ésta otra reseña sobre la serie. Hay guiños a la cultura popular de la época, como por ejemplo la breve incursión de Charles Dickens en un “flashback” de la historia.
Ya entrando por fin con la adaptación televisiva la serie tiene bastantes puntos a favor con la ambientación, vestuario y demás detalles escénicos. Hay oportunos flashbacks y flash-fowards. Pero es el reparto con el que me quedo más. El experimentado Ciaran Hinds es Sir John Franklin, el líder de la expedición. Secundado por Jared Harris como Francis Crozier, el capitán del HMS Terror y punto alto del casting. Tobías Menzies es el comandante del HMS Erebus James Fitzjames. Los tres oficiales andan en constante antagonismo que irá disminuyendo a medida que su situación se dificulte. Con menor rango, pero no menos importante dentro de la trama está Adam Nagaitis como el sociópata marino Cornelius Hickey y Paul Ready es el empático Dr. Harry Goodsir, quizá el personaje más positivo de todos. Mención aparte al perspicaz oficial Thomas Blanky que es bien interpretado por Ian Hart. No olvidar de lado esquimal (también llamado inuit) está la participación actriz y cantante groenlandesa Nive Nielsen como la misteriosa Lady Silence.

Con la novela de Dan Simmons llevo un cuarto de libro. En tanto que el visualizado de la serie televisiva pude haberlo acabado en una tarde. Quizá una de las mejores series del año. Se dice y no pasa nada. Será una actitud muy snob, pero yo seguiré con mi intuición y el buen gusto ajeno; sin importarme que los demás sigan con los culebrones latinoamericanizados de Netflix.
ENLACES
El trágico destino de la expedición que buscaba el paso del Noroeste en el Ártico.
La conquista del Paso del Noroeste.