Librero a mano — Noviembre y diciembre 2017

Poca literatura a final del año pasado. Variada en temática y calidad.
Radio Skylab en un podcats en español de divulgación científica que escucho desde el año pasado. Está enfocado por lo general en la exploración espacial. A pesar del rigor académico hay espacio para la especulación a través de la ciencia ficción. Suelen recomendar obras escritas y audiovisuales al final de los episodios. A mitad de año recopilaron una treintena de relatos breves escritos por sus oyentes centrados en una luna de Saturno. Relatos de Encédalo no merita pasar el rato, salvo por unos cuantos que no caen en los lugares comunes y la falta de coherencia gramatical.
Los panelistas de Radio Skylab también suelen dedicar episodios enfocados a los clásicos del género para comentarlos desde la perspectiva científica. Hicieron un capítulo especial sobre 2001: Una odisea espacial donde hilaron fino en la película de Stanley Kubrick sin dejar de lado la obra de Arthur C. Clarke. De éste mismo autor organizaron a finales del año pasado un club de lectura de Cita con Rama, otra de las obras conocidas del escritor. Detalla un futuro en donde el ser humano se ha expandido en colonias por el sistema solar, desde Mercurio hasta Ganimedes; otra luna de Saturno. Detectan un objeto fuera de nuestro sistema dirigiéndose hacia el Sol. Al principio creen que se trata de un asteroide, pero luego ven que es objeto cilíndrico de posible origen alienígena. Por lo que envían una misión tripulada para su estudio. El libro fue publicado en 1973 y derivó posteriormente en varias secuelas. Hoy puede resultar algo convencional. Por otro lado ahonda en temas como el constante peligro de Tierra frente a los asteroides y las pugnas interplanetarias por lidiar con lo desconocido.
Con Días de proletarización (2017) Fabián Coto recopila una serie de textos inspirados en su experiencia como oficinista en Escazú. No se guardar nada de la ironía y el tono mordaz que lo caracteriza al detallar, entre cafés y almuerzos, muchas las situaciones que envuelven al asalariado medio dentro de la actividad económica predominante. A pesar de eso el libro se siente menos elaborado que otros escritos suyos como El país de las certezas (2015) y muchas de sus columnas que publica por Internet. El libro salió al mercado a finales del año pasado cuando tenía un trabajo ocasional en Escazú. No en los oficentros de Plaza Roble donde el autor trabajó, sino ahí cerca en las bodegas de Guachipelín. Un lugar que lo conforma una calle estrecha que empieza en la rotonda de Multiplaza y se extiende hacia lo que en otros tiempos eran potreros, del cual quedan muy pocas hectáreas. Hay una vista privilegiada a los barrios periféricos de Pavas, separados del cantón de Escazú por altos precipicios donde pasa el río… Pero esa es otra historia que con suerte podría semejarse un poco con las de Días de proletarización.
Decir para finalizar que en esos dos meses abandoné un libro. Nunca leí de corrido las Leyendas de Gustavo Adolfo Bécquer y me propuse hacerlo luego del Día de Difuntos. Varios escritos de Bécquer tuve que leerlos en el colegio y desde entonces me fascinaron. Como La ajorca de oro y El monte de las ánimas, que más de una vez no me dejó dormir. Fue una época en la cual también tenía afinidad por otra literatura semejante como la de Edgar Allan Poe y H.P. Lovecraft. Sin embargo, la relectura de las leyendas de Bécquer resultó pesada. No recordaba lo exagerable mente descriptiva que era. Por eso quedó relegada frente a los libros mencionados anteriormente. Quizá resulte mejor leerla aleatoriamente como lo hacía antes. Probablemente parte de marcar años en el calendario se note en tener interpretaciones diferentes a las adquiridas en las primeras lecturas.